3 formas en las que las empresas pueden contribuir ante el COVID-19

La situación actual nos está retando a todos. También a las empresas, quienes están poniendo a prueba no sólo su responsabilidad social, sino también su capacidad de innovación y adaptación en momentos de crisis.

En un contexto marcado por el replanteamiento del capitalismo y la responsabilidad empresarial, la crisis del COVID-19 pone el foco en las empresas y sus compromisos con sus comunidades.

Durante estos días hemos visto como multitud de empresas han emprendido acciones para aliviar la situación sanitaria y social. Para que esas iniciativas sean realmente efectivas es importante conjugar dos elementos clave: que respondan a las necesidades sociales reales y que estén alineados con el propósito de una empresa. Solo así será posible que las compañías puedan ofrecer su experiencia y conocimiento a plantear soluciones eficientes.  

Para lograrlo, desde el World Economic Forum (WEF) subrayan la importancia de la innovación social corporativa. Este concepto se refiere a la necesidad de las empresas de actuar de forma responsable con sus grupos de interés y a su vez hacerlo con nuevas soluciones innovadoras.

En este sentido, el WEF pone en valor tres ámbitos clave a los que están contribuyendo las empresas de forma innovadora durante esta pandemia, más allá de las aportaciones al sistema sanitario:

1. Fomentar el bienestar mental y psicológico de las personas. En especial a aquellas personas más vulnerables que pueden verse afectadas emocionalmente por la pandemia como las personas mayores.
2. Ofrecer seguridad financiera. El miedo a una nueva crisis económica está haciendo que las familias españolas se sientan inseguras sobre su futuro. En esta situación las empresas deben ser responsables de asegurar el empleo de calidad todos sus trabajadores. Además, hemos visto como, en especial desde el sector financiero se están aplicando medidas para facilitar el pago de hipotecas y deudas.
3. Apoyar a los pequeños negocios. Los negocios más pequeños, en especial aquellos que han tenido que cerrar por las medidas de confinamiento se verán especialmente afectados por esa situación. Para apoyarlos, desde el sector empresarial se han puesto en marcha iniciativas como nuevas líneas de crédito que facilitan la estabilidad de estos comercios.

Sin duda, el sector empresarial puede demostrar durante esta crisis global el alcance real de su compromiso con las comunidades que les rodean y poner en valor su propósito y la innovación en sus iniciativas.

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